Pues como todo lo bueno, como siempre digo, llega su fin. Y nos toco coger el avion Madrid-Lyon. Con algun problemilla con el saco de Hugo, que tuvimos que luchar un buen rato para atar todas las cosas que llevaba y finalmente meter todo en una bolsa gigante, pudimos enbarcar y el vuelo fue perfectamente.
Al llegar a Lyon, reencuentro con los padres que nos estaban esperando, la foto final de campamento y las despedidas y abrazos. Tambien llega el momento (uno de mis preferidos) donde los padres te agradecen el tiempo y el trabajo realizado con sus hijos. Como siempre digo y pienso, el placer siempre es mio de disfrutar de tanta gente maravillosa como suelo conocer en los scouts.
Y Nazita y yo a descansar y recuperar fuerzas en nuestra nueva casita de Lyon. FIN de una aventura scout más. Deseando que llegue la proxima y que sea parecida a esta que durante dos semanas hemos vivido. Fue un verdadero placer disfrutar de un gran campamento y estoy orgulloso de nuestro trabajo realizado. SEMPER FIDELIS.